Tuesday, February 17, 2009

Gladis era su nombre.

Cuando tenia 13 años me dieron ganas de empezar a trabajar (TAN ñoña) y pues me metí a trabajar de empacadora.... cerillo pues! en ese entonces era la persona más sin chiste del mundo, o al menos así me sentía. Cabello largo y esponjoso además de maltratado y feo, cara lavada de niña buena, nada de nada de bubis ni de nada. La verdad no estaba tan traumada hasta que entre al mundo de los cerillos... ellas iban de los 13 a los 16, con sus cabellos sedosos y lindos, sus pestañas con rimel y su maquillaje coqueto.

Así pues, cuando entre mas asustada que una rata y sin saber que hacer, las cajeras me "abarataban" (termino cerillezco que significa que estabas hasta la madre de productos sin embolsar y la cajera era la culpable por su rapidez) yo le daba a personas cosas que no eran de ellas, lo que es lo mismo a quitarles cosas que SI eran de ellas, invariablemente me quedaba con un paquete de papel de baño al lado mío, ya que esos no caben en bolsas y según yo los dejaba a un lado para dárselos al final... si como no! y obviamente no faltaba el que si se daba cuenta y se enojaba. Pero lo peor era cuando te pasabas tu media hora embolsándole a una señora con 3 carritos atascados, para que??!!! Para que te diera la esplendida cantidad de 50 centavos o de plano ni las gracias... El punto es que ya llevaba yo una semana en esos menesteres y un buen día cuando llegaba a mi turno vi a una chava "nueva", así que fui a ser amigable con ella y a querer enseñarle como era el asunto ahí jajaja después de unos pocos minutos me dí cuenta que NO era nueva, de hecho llevaba desde sus 13 años ahí y estaba próxima a irse porque ya casi cumpliría los 16, conocía a todos, era súper graciosa, buena onda, bonita, empacaba en chinga... y yo queriéndole enseñar como estaba el asunto, pobre ilusa!. Pero como me había visto wenaonda con ella, eso me catapulto a los altos circuitos de los empacadores... eso y el hecho de que no tenia simpatizantes del sexo femenino (viejas envidiosas) entonces conocí las tiendas donde nos vendían alcohol y tabaco, las heladerías mas preciadas de la colonia de atrás, a los cocineros que te regalaban pizza gratis y los panaderos que también te daban pasteles gratis, supe la forma de conseguir descuentos en los helados, ella me enseño las papas a la francesa, podía irme con ella toooodo el santo día y trabajar solo 2 horas y ganar lo mismo que si hubiera trabajado tooodo el turno porque nos daban las mejores cajas y FIJAS! eso era ser VIP y no mamadas. Gladis solo tenia una debilidá, los hombres! tenia un novio en cada turno (eran 3) su novio de la escuela y su novio de por su casa, una vez se le juntaron 2 que fueron por ella después del trabajo, yo tuve que decirle a uno que se había ido antes porque se sentía mal, mientras ella se escondía en el baño y el otro era hábilmente distraído por los chavos jeje. Todo era la neta, me encantaba mi trabajo, parecía estrella de cinito saludando a todos mis conocidos en la tienda, con ella fueron las borracheras más graciosas, me ponía peda con 2 “new-mixe”, ganaba dinero pa´ mis lujos ya que con 50 pesos al día me parecía que era millonaria... pero como todo, un día se termino.

Después de un tiempo ella ya había cumplido los 16, pero no había dejado de ir, ni la habían corrido por que nadie se había dado cuenta, pero un mal día que empezaron a revisar los registros y psss que la corren y como en esos tiempos no se veía lo de los celulares, es más, ni teléfono tenia en mi casa, nunca volví a saber de ella, la vida no volvió a ser la misma y a los pocos días desistí del trabajo....

Ella es de esas personas que marco mi vida y no sé ni su nombre completo, que fiasco!

2 comments:

tOTo said...

jejej.... los helados

rafastarix said...

jaja excelente texto, de hecho me enorgullezco de haber sido cerillo alguna vez!! era un empleo de lujo para un niño!